El ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, señaló en las redes sociales el inicio de su visita a una Venecia afectada por las inundaciones y el mal tiempo desde hace una semana y provocó de nuevo polémica por mostrar, según muchos que lo siguen, falta de tacto y sensibilidad ante la tragedia que se abatió en la región de Veneto y que ya ha causado 29 muertos por toda Italia.
Según el diario El Mundo, algunos han criticado su postura: «Es una tragedia, no una excursión». En el tweet de la polémica, Salvini escribió que la Protección Civil partió hacia Belluno, «para visitar las áreas afectadas por deslizamientos de tierra e inundaciones y traer la primera ayuda concreta del Gobierno». Y remataba, en el mismo tono de la sonrisa: «Buen domingo, amigos, los que paran están perdidos». Para mejor subrayar el mensaje, el ministro dejó escrita un guiño de ojo.
Tuta della Protezione Civile e si parte direzione Belluno, per visitare le zone colpite da frane e alluvioni e portare i primi aiuti concreti del Governo.
Buona domenica Amici, chi si ferma è perduto? pic.twitter.com/UaQTOmk79S— Matteo Salvini (@matteosalvinimi) November 4, 2018
En las horas siguientes, Salvini publicó muchas fotos de las visitas a lugares afectados y de las reuniones que mantuvo con las autoridades locales y miembros de la Protección Civil. Pero no pudo resistir un tuit más para atacar a sus detractores: «Si yo me voy a criticar a ir si no me va a criticar por no ir», escribió de nuevo con un helicóptero de rescate como telón de fondo.
Se vado, mi criticano perché vado.
Se non vado, mi criticano perché non vado.
Se sono triste non va bene, se sorrido non va bene.
Sapete una cosa, cari criticoni, professoroni e giornalisti di sinistra?
Me ne frego, penso agli Italiani e continuo a lavorare! pic.twitter.com/EwGy4koUz3— Matteo Salvini (@matteosalvinimi) November 4, 2018
Salvini ya había sido duramente criticado por la caída de un puente en Génova, cuando había ido a una fiesta de su partido, la Liga Norte. «Las imágenes Salvini celebran las dramáticas horas a Génova son una bofetada en la cara de nuestro país», le acusó el presidente del Partido Demócrata, Matteo Orfini, en la oposición.