¿No sería genial poder convertir todas las carreteras asfaltadas en una fuente de energía? Pues, bajo esa premisa se desarrolla una campaña de impulso para la implementación de carreteras solares.
Países como Holanda y Francia ya han construido las primeras carreteras solares, con la capacidad de suministrar electricidad a más de 5 millones de personas, promoviendo la nueva tendencia global para producir energía limpia y hacer de las ciudades, entornos más sustentables.
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¿Qué son las carreteras solares?
En mayo de 2014, desde Idaho se dio a conocer un proyecto sumamente interesante. El matrimonio Scott y Julie Brusaw fundaron Solar Roadways, una empresa que luego de haber firmado un contrato con el gobierno de los Estados Unidos por 100.000 dólares, logró recaudar 2,7 millones de dólares para implementar su sistema en todo el país.
Las carreteras solares consisten en placas de 7 mm de espesor que al colocarse sobre el pavimento permiten la recolección de energía solar por medio de una capa de silicio policristalino, intercalada con vidrio, caucho y cemento.
Las primeras pruebas
En Estados Unidos, los resultados no fueron tan buenos. Para el año 2016 se realizaron las primeras pruebas y pocos meses después de la instalación de un tramo de carretera solar, el mismo comenzó a presentar fallas y en la actualidad, el 83% de sus paneles no funcionan y por lo tanto, no están produciendo ninguna electricidad.
Sin embargo, los resultados de las pruebas en Holanda son mucho más esperanzadores. Allí se instalaron paneles solares con un recubrimiento de vidrio en un tramo de asfalto de 70 metros y el resultado de la prueba ha sido que ese espacio produce 3000 kWh en 6 meses, suficiente para que una casa pequeña tenga energía limpia durante un año completo.
Mientras tanto, el primer estacionamiento experimental, 100% de paneles solares y otros ensayos ya se encuentran en marcha para mejorar las características de este prometedor sistema.
¿Qué nos espera en el futuro?
Desde hace muchos años se viene trabajando con empeño para desarrollar nuevas fuentes de energía eléctrica aprovechando los recursos naturales renovables. Los paneles solares han sido una de las invenciones más útiles en ese sentido. Cubriendo 1,7% del territorio estadounidense con las carreteras solares, se lograría producir energía para 5 millones de personas, según las estimaciones de Nate Lewis, experto en energía solar.
Sin embargo, las primeras limitaciones del sistema ya han surgido. Principalmente lo referente a la durabilidad de los paneles solares en el asfalto. Actualmente, solo se han probado en vías de ciclismo, pero el desarrollo de los paneles tendrá que perfeccionarse hasta ofrecer suficiente resistencia y poder soportar el paso de vehículos más pesados, y ofrecer la suficiente tracción para garantizar la estabilidad de los vehículos.
Se presume que esta clase de pavimento haga que las carreteras del futuro sean inteligentes, pudiendo calentarse para disolver la nieve y ofrecer recarga de batería a los coches eléctricos, además, cada medio kilómetro tendría la capacidad de sustentar la energía de 500 casas.
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